Limpiar el oro es una tarea que requiere meticulosidad y determinación, pues es necesario primero conocer la pieza que vas a limpiar, para saber si se trata realmente de oro puro y si tiene otras incrustaciones o materiales que, de limpiarse, podrían terminar estropeándose. A continuación te contaremos cómo limpiar oro de la manera adecuada.
Todo depende del tipo de oro
Lo primero que debes saber antes de empezar a limpiar tus prendas, es si realmente son oro. Muchas veces compramos joyas que aunque aparentemente parezcan oro, son otro tipo de material bañado en color para asemejar este preciado elemento. Para descubrir si tu pieza es de oro puro, puedes utilizar diferentes técnicas de prueba.
Cuando descubras que tu pieza es, efectivamente, de oro, la siguiente tarea será descubrir qué tipo de oro es. En la actualidad existen joyas de oro amarillo, blanco y rosa. Cada uno de estas tonalidades depende del grado de aleación, es decir, si se trata de oro puro o, por el contrario, oro fundido con otros metales.
Técnicas para limpiar oro
En función del tipo de oro del cual esté diseñadas tus piezas, puedes hacer uso de diversas técnicas de limpieza, la mayoría de ellas empleando materiales que tienes en casa, por lo cual, son técnicas rápidas, caseras y sencillas. Algunas formas de limpiar oro rápida y correctamente en casa son las siguientes.
Dentífrico dental
Por sorprendente que parezca, la pasta de dientes, también conocida como dentífrico dental es un excelente material para limpiar tus prendas de oro. Lo único que necesitarás será sumergir las prendas en agua tibia e irlas frotando cuidadosamente con un cepillo de cerdas suaves, de manera que vayan recuperando su brillo natural.
Jabón lavavajillas
El jabón con el que lavamos la vajilla del hogar es el aliado ideal para mantener intactas las prendas de oro. El procedimiento es sencillo, solo debes sumergir las piezas de oro en agua tibia con un poco de jabón lavavajillas y dejarlas allí por un par de minutos. Tras retirarlas, puedes aclarar el jabón con más agua tibia y secar con un paño suave.
Amoníaco
Para limpiar oro con esta técnica es necesario que tengas plena certeza de que tu prenda está totalmente fabricada en oro, pues el amoníaco es un material altamente nocivo y puede acabar por deteriorarla. Para limpiar, debes mezclar seis onzas de agua con una gota de amoniaco y sumergir por un tiempo menor a un minuto. Con esto bastará para quedar limpias.
Huevo
El líquido que se forma del huevo batido es un elemento adecuado para limpiar oro, específicamente blanco. Lo único que debe hacerse es bañar la pieza en el huevo batido y transcurridos unos minutos, retirar con un paño suave. Las piezas brillarán tanto como cuando estaban nuevas.
¿Por qué se ensucian las piezas de oro?
La razón es simple. El oro se ensucia cuando reacciona con otros niveles de pH, por lo cual, al mezclarse con sustancias como el sudor o el cloro, tiende a ensuciarse. Esto es una respuesta totalmente natural que es imposible de erradicar, solo se puede evitar y, por supuesto, cuando estén muy sucias, será muy sencillo limpiarlas siempre y cuando se trate de oro puro.